El vidrio

Resulta que el día de ayer por razones totalmente desconocidas (se sospecha del viento) una parte de la fachada del edificio en donde vivo decidió emprender el vuelo, se le olvidó que se necesita mucho más que una superficie plana para hacerla de pájaro y se estrelló en la esquina inferior del enooorme vidrio que tenemos por ventana, de hecho es una paredventana ya que corre de piso a techo, pues bien, gracias a ese símbolo el vidrio se rompió pero se quedó en su lugar, así que hablamos al vidriero y hoy quitaron con mucha dificultad el vidrio viejo y lo reemplazaron por uno nuevecito, lo que me encantó es que ayudé a "volar" el vidrio, los muy babas pensaron que podían subir esa cosa por las escaleras y pues nomás no se pudo, así que decidieron volarlo, el dueño medio terco pero el chalán mayor más prudente, afortunadamente me hicieron caso y pusieron una cuerda guía.

Bien, el mentado vidrio pesa un chingo y la subida estuvo bien, para los que conocen el depto (creo que tengo un par de lectores y uno de ellos soy yo) saben que sin vidrio no hay nada, es decir, es una caída libre, puas así andábamos subiendo el vidrio, se complicó la cosa, mis piernas temblaban del esfuerzo y pues ni modo, apechugar, maniobras peligrosas pero al final lo pudimos meter, terminamos empapados y temblando, fue algo realmente increíblemente agradable, voy a poner un negocio así.